Un hombre ha fallecido y un joven continúa grave al sufrir sendas paradas cardiorrespiratorias mientras participaban en el Movistar Madrid Medio Maratón, celebrado este domingo en la capital. El primero de ellos sufrió un infarto repentino cuando tan solo le quedaban 500 metros para llegar a la meta. Según informan fuentes de Emergencias Madrid “cayó desplomado” y fue trasladado “sin pulso”, al hospital, donde finalmente murió.
Ambos corredores, de 35 y 20 años respectivamente, fueron atendidos de gravedad durante la cita. El fallecido fue asistido por un enfermero del Samur- Protección Civil a la altura de Cibeles que estaba participando en el dispositivo médico desplegado. El sanitario practicó las maniobras de reanimación cardiopulmonar junto con una Unidad Lince, el equipo de voluntarios que acude a las asistencias en bicicleta en este tipo de eventos, hasta que llegó el resto de equipos.
Después fue trasladado al hospital de La Paz, donde continuaron con las maniobras de reanimación. Por expreso deseo de intimidad de la familia, la organización no dio detalles sobre la persona fallecida y únicamente transmitió su “más sentido pésame” a través de un comunicado.
En el segundo caso, el corredor fue atendido en el Paseo de Recoletos por un médico espectador y dos miembros de seguridad del Medio Maratón que practicaron maniobras de reanimación al varón hasta la llegada del resto de equipos sanitarios. Después fue trasladado al Hospital Clínico, donde se encuentra actualmente en la UCI con pronóstico reservado.
Los efectivos sanitarios desplegados por el evento deportivo, que reunió a 27.000 personas, llevaron a cabo un total de 50 asistencias por golpes de calor y esguinces, entre otras causas atendidas.
El del hombre de 35 años no es el primer fallecimiento registrado en la historia de la media maratón madrileña. En 2010, un atleta de 31 años de edad falleció al desplomarse después de cruzar la meta de la carrera, que en aquel momento se situaba en el parque de El Retiro.
Después de aquel suceso la meta cambió de ubicación y se instaló en un punto más llano para facilitar la llegada a los corredores, evitándoles ese último pico de alta intensidad después de haber recorrido más de 20 kilómetros. Este año, la línea de meta se situaba en el Paseo de Recoletos, frente a la sede la Biblioteca Nacional de España y sin grandes rampas previas de subida.
Años antes, en 2005, otro joven madrileño de 24 años, falleció por muerte súbita cuando participaba en la carrera. El corredor se desplomó a mitad de carrera y entró en parada cardiorrespiratoria. El infarto fue fulminante, por lo que los sanitarios que lo atendieron no pudieron hacer nada por salvarle la vida.
CORRECCIÓN: En una versión anterior de esta noticia se aseguraba que el joven de 20 años había fallecido. Sin embargo, fuentes hospitalarias confirman que a las 12.00 de este lunes se encuentra con vida, ingresado en la UCI.